Hace unos años, descubrí el Cacao Ceremonial. Sin saber lo que era pero con mucha intriga y ganas de probarlo una mañana decidí prepararlo y beberlo antes de meditar.
Mire un video en internet para ver como se hacía, en esa época este era un alimento que apenas se conocía y lo que se veía era muy misterioso y sin dar casi explicaciones de nada. Finalmente dí con un video y tomé nota de como prepararlo y me hice una idea de lo que podía ser un ritual.
A la mañana siguiente me desperté de madrugada y entré a la cocina con la intensión de vivir esta nueva experiencia, puse música tranquila que levantaba mi ánimo y hacía sentir en sintonía. Mientras calentaba el agua, piqué el Cacao Ceremonial que tenía y se lo fui agregando al agua poco a poco mientras lo mezclaba y disfrutaba de su aroma y observaba como despacio se convertía en una bebida cada vez mas espesa. Una vez que la bebida parecía estar lista elegí una taza que me gustaba mucho y me serví el Cacao, me lo lleve a mi espacio de meditación, encendí una vela puse la bebida a la altura del corazón y puse una intensión.
La experiencia fue transformadora. Alcancé una profundidad en la meditación que nunca antes había experimentado. La claridad mental y la sensación de bienestar que sentí durante todo el día me dejaron asombrada. A pesar de estar atravesando un momento difícil, me sentía segura, alegre y confiada.
Desde entonces, el Cacao se convirtió en mi compañero diario. Cada mañana, antes de que mis hijos despierten, enciendo una vela en el espacio sagrado que tengo en casa y, antes de beberlo, expreso mi gratitud y establezco una palabra guía para mi día.
Este ritual matutino se ha convertido en una parte esencial de mi vida. Me siento con más energía, mi mente está más despejada y me siento más centrada. He notado cómo el Cacao nutre mi cuerpo y mi espíritu, dándome fuerza y claridad.
Lo que más valoro de este ritual es el tiempo que me dedico a mí misma. En el silencio de la mañana, antes de que el mundo despierte, me permito conectar conmigo misma. Al preparar el Cacao, soy consciente de cada acción, desde picarlo hasta calentar el agua. Cuando me siento frente a mi altar, enciendo una vela y algún elemento de limpieza energética, como palo santo o copal. Este momento es sagrado, un espacio para escuchar mi voz interior y conectar con mis necesidades.
El cacao: un puente al corazón
El Cacao ha sido utilizado desde tiempos ancestrales por las culturas mesoamericanas como una bebida ceremonial. Considerado el alimento de los dioses, el Cacao no solo nutre el cuerpo, sino que también nos conecta con nuestro entorno y con los demás. Trabaja en el área del corazón, un aspecto que a menudo descuidamos en la vida moderna.
Un ritual personal y adaptable
No es necesario realizar una ceremonia elaborada para disfrutar del Cacao. Cada vez que te tomas un momento para prepararlo y beberlo con intención, estás creando tu propia ceremonia. El ritual del Cacao es un regalo que te haces a ti mismo, una oportunidad para conectar con tu corazón y comenzar el día con gratitud y presencia.
Una bebida de Cacao se puede preparar de muchas maneras: con agua, leche vegetal, especias, miel o sirope. Puedes agregar plantas medicinales o adaptógenos para potenciar sus beneficios, la manera en que te apetezca tomarlo es perfecta.
Te invito a probarlo
Te invito a experimentar con el Cacao y a descubrir sus beneficios por ti mismo. Permítete crear tu propio ritual, adaptándolo a tus gustos y necesidades. Descubre cómo el Cacao puede ayudarte a conectar con tu esencia y a vivir una vida más plena y consciente.